VINOSDELATIERRA
Contingentación de las ventas
El Consejo Regulador ha contribuido con su comportamiento a la creación de un cártel para la comercialización de los vinos de Jerez.
Ante un mercado en una situación de reducción de demanda como era la que el vino de jerez venía experimentando (sobre todo en demanda externa) las principales bodegas del Marco acordaron reducir la oferta de vino comercializable para el mercado BOB, con el fin de poder aumentar los precios. Consta acreditado en el expediente sancionador de la Comisión Nacional de la Competencia (CNC) que varias de las principales operadoras de este sector establecieron en el año 2001 un cártel para controlar la producción y el precio de los vinos de jerez que eran destinados a la exportación bajo las marcas blancas de los comercializadores en destino, el denominado mercado BOB (Buyer Owns Brand) del vino de jerez.
Durante los primeros años el acuerdo funcionó según se esperaba, con la participación del Consejo Regulador de la Denominación de Origen, dando lugar a un incremento de esos precios. Atraídos por esos mayores precios entraron en este mercado otros operadores, aumentando consecuentemente la oferta, lo que produjo, a su vez, un nuevo descenso de los precios. Con el fin de volver a la situación inicial del cártel, nuevas medidas para restringir la oferta de producto fueron calculadas, diseñadas y puestas en práctica por los miembros del cártel, imponiéndolas con carácter obligatorio para todas las empresas del sector. Para ello el cartel contó con la participación de FEDEJEREZ, que diseño las fórmulas de dichas restricciones de oferta, y con el Consejo Regulador de la Denominación de Origen, que emitió las correspondientes normas que contenían dichas restricciones de ofertas. El Consejo Regulador ya fue sancionado por esta última fase en un expediente anterior, por lo que su imputación en el expediente del "cártel del BOB" se limita al periodo que va desde 2001 hasta junio de 2006.
En esta segunda fase se incorporaron al acuerdo de cártel otros pequeños productores. Junto a las restricciones de la producción fueron diseñadas otras medidas complementarias y habituales en este tipo de cárteles, como son incrementos pactados de precios, repartos de mercados y clientes, o los correspondientes controles de seguimiento del cumplimiento de los acuerdos por todas las partes implicadas. El cártel estuvo activo siete años, desde 2001 hasta 2008, momento en que la CNC incoó expediente sancionador y realizó las inspecciones.
Fuente: Nota de prensa (PDF)
Descargar Expediente completoAUDIENCIA NACIONAL
La Audiencia Nacional considera que sí se pueden incluir los acuerdos sobre cupos como una de las conductas que integran la infracción única y continuada.
El establecimiento del cupo sobre ventas no es una conducta independiente y aislada sino de un instrumento nuevo al servicio de los mismos interesados y el mismo fin consistente en la limitación de la oferta con el fin de incrementar los precios del producto BOB. El cártel tuvo en su primera etapa un instrumento, la mesa BOB formado por una serie de elementos: limitación del mercado BOB, reparto de los cupos, precios mínimos, y compensación, que resultaron útiles para el objetivo que perseguían. Y la prueba de su éxito, el incremento de precios en el BOB, fue que otros productores no presentes en ese mercado se vieron atraídos por el ante la subida de precios que se estaba observando. Y ese fue precisamente la causa de su desestabilización, porque los nuevos oferentes en este mercado comenzaron a ofertar bajando precios para poder entrar en dicho mercado, lo cual supuso que los miembros del cártel comenzaran a perder parte de su negocio y se plantearan los incumplimientos que tuvieron lugar en 2004. No obstante de esa situación el cártel obtuvo una importante lección, tenían que controlar la producción total, no solo la de los miembros del cártel, pues en caso contrario sin ese control de la producción no podían controlar los precios. Eso les llevó a diseñar nuevos instrumentos que controlen toda la producción, con el objetivo de siempre. Así surge la idea del cupo discriminando de ventas en función no de las existencias, sino de las ventas. Por tanto se cumple el requisito exigido en la jurisprudencia comunitaria ya que esos comportamientos "presentan un vínculo de complementariedad, en el sentido de que cada una de ellas está destinada a hacer frente a una o varias consecuencias del juego normal de la competencia, y contribuyen, mediante una interacción, a la realización del conjunto de los efectos contrarios a la competencia buscados por sus autores, en el marco de un plan global encaminado a un objetivo único".
Descargar sentencia completaCOMENTARIO
Se realizaron actuaciones tendentes a conseguir ese objetivo de reducir el vino que podía ser comercializado que se concreto en la alteración del artículo 32.1
El haber dirigido hasta ahora las consideraciones hacia la modificación del artículo 32.1 ha podido desviar inoportunamente la atención, cargándola sobre cosas que apelan con demasiada fuerza y claridad a los “cupos de comercialización” en deprimento de “las medidas que se implementaron” en el Consejo para garantizar el éxito del Cártel del BOB. Pero no debería ser así, puesto que la primera es sólo un caso particular, sin duda más probatorio por más escandaloso, de lo que abarca la segunda. El que el momento de los “cupos” atrajese con excesivo vigor la carga sobre sí, difuminando las demás medidas implementadas, sería tan indeseable como el que un asunto especialmente escabroso como el de las “botas de vino en crianza” diese lugar a que éstas se llevases consigo cuanto podría ensombrecer cualquier otra medida impuesta desde el Consejo Regulador. Y, en efecto, bien cabe sospechar que no otra ha sido la mira, o al menos puede haber sido el resultado, de la reducción y equiparación de las existencias mínimas exigidas tanto para las bodegas inscritas en el registro de crianza y expedición como para los almacenistas. Con semejante equiparación, sumamente eficaz para que se lave la cara ante el procedimiento de vigilancia de resolución que abrió días antes la extinta Comisión Nacional de la Competencia —tan eficaz que compensa con creces la pérdida que pueda aparejar para las rentas de las bodegas dominantes y todas las del ramo, habida cuenta de que los “almacenistas” son al cabo las "bodegas" de menor cuantía—, no se viene a atentar ni aún levemente contra el inmenso potencial que el nuevo reglamento de la Denominación de Origen ha llegado a alcanzar.
Descargar PDFAREA DOCUMENTAL
ARTÍCULOS RELACIONADOS
Reducción de existencias
El Marco del Jerez está perdiendo su carácter de espacio productivo centrado en la vitivinicultura para transformarse en un centro de embotellado y distribución logística de bebidas alcohólicas que genera menos empleo ya que las necesidades de trabajo quedan desvinculadas de la actividad productiva y dependen exclusivamente de los cupos de ventas asignados.
Ampliar Descargar entradaLa arbitrariedad de los "cupos"
El establecimiento de cupos para cada campaña se hará según criterios de defensa y mejora de la calidad y no como un factor de corrección sobre existencias. Al reducir la oferta de vino las existencias tenderían a crecer más allá de lo razonable de manera que para contrarrestar este incremento no solo se “racionalizan” las compras de uva y mosto sino que también ajustan los límites máximos de producción o “cupo de uva calificada”.
Ampliar Descargar entradaDominancia colectiva
La dominancia colectiva tiene su base en el control que las principales bodegas del Marco ejercen sobre el Consejo Regulador que actúa como un "consejo de admistración" al servicio de los grupos dominantes en lugar de un "organo de gestión" regido por criterios de defensa y mejora de la calidad.
Ampliar Descargar entradaMecánica de concesiones
Existe toda una “mecánica de concesiones” que ha llevado a dirigentes sectoriales desde la debilidad a la “solidaridad” con los bodegueros. Cada concesión hecha a los bodegueros en el seno del Consejo Regulador arrastraba a su vez otra. Ésta no era más grave que la primera; pero ambas juntas, formaban una cobardía. Dos cobardías reunidas era ya la “traición” al sector productor.
Ampliar Descargar entrada